El pasado del cual uno viene, siempre es intenso por acogedor y legendario, nos devuelve al campo, al aroma de la infancia, se esparce al borde de la ciudad, invade el terreno de los recuerdos e invita a remover historia, geografía y costumbres que han tatuado nuestras pieles querendonas al sur de Ayacucho.
Las historias de Perú Adentro no han sido sopesadas porque se han escrito al margen de la que se considera principal, es un archipiélago donde hay una capital hegemónica que desea abarcar, copar y quedar como la única que pueda contar su historia y alimentar su economía, Lima.
